¿PAZ O GUERRA? COLOMBIA EN MEDIO DE UNA DECISION

Por: Óscar Alemán.

Colombia en estos momentos está en una dicotomía, paz o guerra. Los colombianos no saben o entienden como es el proceso de negociación, ¿está guiando al mejoramiento del país o lo estamos entregando a la guerrilla? En los medios de comunicación se mueve información tan variada que guía a seguir con este y otros cuestionamientos. Estamos en medio de una cortina de humo impuesta entre los políticos, las Farc, el ELN y los medios convencionales.

Que se sabe del proceso de paz.

Mientras en la televisión, la prensa y la radio siguen los debates Santistas vs Uribistas sobre el proceso de paz, en pro y en contra respectivamente, las redes sociales se llenan de periodismo ciudadano informando y desinformando sobre el proceso. Canales de YouTube “creepypastas” y crítica periodística alternativa que niegan la existencia o la evolución del proceso, generando una cortina de humo con fotografías de los negociadores disfrutando del turismo cubano. Si esta situación continúa ¿Qué sucederá con Colombia? ¿Las víctimas y sus ciudadanos seguirán como borregos tras las promesas de políticos e insurgentes?

En este momento ya han pasado tres comités de víctimas, de primer y segundo nivel, que esperan que se acabe la guerra, que por 50 años ha afectado al país y sus ciudadanos. Por sus declaraciones no quieren una paz con impunidad y excusas, sino con hechos realizados por ambas partes. Según el general retirado, Luis Herlindo Mendieta, que estuvo con las víctimas de las Farc en la Habana y sufrió de doce años de secuestro, las buenas intenciones no llevaran a la paz, sino los hechos.

Mendieta reclamó a las FARC “hechos verdaderos” de paz

"Creeré en el proceso de paz cuando se comience con hechos verdaderos. Por desgracia, hasta el momento no tenemos ninguno. Solo se queda en buenas intenciones.” Dijo Mendieta al Espectador. En la habana las víctimas de la guerra buscan la paz, piden también que se eduque a la gente sobre este proceso y obviamente piden justicia. 

Cronológicamente podemos ver que este proceso  de dos años, el próximo 18 de octubre, ha generado dudas y consternación a todo el país. Desde antes de su “puesta en escena”, en 2012,  se rumoraba de acuerdos con la guerrilla, y el ex presidente y Senador Álvaro Uribe Vélez afirmaba de una negociación clandestina y antidemocrática entre Juan Manuel Santos y Las Farc. Rumores que empezaron a  ser rechazados por el ministro de defensa Juan Carlos Pinzón y puestos en duda tras la comunicación del máximo líder del ELN (Ejército de Liberación Nacional) alias “Gabino” en la que afirmaba estar dispuesto a la negociación.

“Es una bofetada a la democracia”: Álvaro Uribe Vélez

El primer paso que tuvo el país en este proceso, conociendo claramente que existe, fue en Septiembre de 2012 con la alocución del Presidente juan Manuel Santos donde aclaro que iban a negociar con prudencia y sin detener las acciones de la fuerza pública; además de la comunicación de “Timoleon Jiménez” donde destaco que la FARC iban a la mesa “sin rencores ni arrogancia”. La población estaba emocionada, pues tras años de intentos y fracasos por fin habría justicia y paz. Lo cual aún está en negociación. Aun así también existía la pregunta ¿Qué pasara con las víctimas del conflicto?

Según la ley de víctimas y restitución de tierras, ley 1448 de 2011 “El objetivo de esta norma es establecer un conjunto de medidas judiciales, administrativas, sociales y económicas, individuales y colectivas, en beneficio de las víctimas del conflicto armado interno, que posibiliten el efectivo goce de sus derechos a la verdad, la justicia y la reparación con garantía de no repetición, de modo que se reconozca su condición de víctimas y se dignifique a través de la materialización de sus derechos constitucionales.” Lo cual lleva a que estas personas que han sido vulneradas, tengan el apoyo del gobierno, justo y legal, sin generar lastima, dolor o piedad de los demás. Mas esta ley que guía al apoyo de las victimas aún está a la espera de las decisiones de la Habana, pues aunque no se vaya a cambiar o afectar los beneficios de  esta norma si se van a ver las reacciones de las víctimas y de los medios que mostraran lo bueno y lo malo según convenga.

Victimas, proceso de paz Colombia

La Ley de Victimas y restitución de tierras ha generado un apoyo integral, en el cual no solo se les informa, sino también se le dan garantías económicas, psicológicas, sociales y de no repetición, lo cual puede generar el desarrollo de victimas reales. ¿Por qué victimas reales? La victimas son denominadas por la ley como: “ Las víctimas son aquellas personas que individual o colectivamente hayan sufrido un daño por hechos ocurridos a partir del 1o de enero de 1985, como consecuencia de infracciones al Derecho Internacional Humanitario o de violaciones graves y manifiestas a las normas internacionales de Derechos Humanos, ocurridas por el conflicto armado interno.” Por lo cual hay quienes se apoyan de esta norma para ser mantenidos por el estado, simulando desplazamiento forzoso, daños colaterales, familiares muertos o desaparecidos y así obtener falsamente este apoyo. Obviamente muchos de ellos caen en sus mentiras y ante la negativa burocrática se dirigen a las calles a mendigar, generando lastima de la ciudadanía y desinformación sobre el aporte gubernamental. Según datos del DANE a Marzo de 2012 se habían dado apoyo a 64.121 familias.

A este punto nadie sabe a quién le conviene más este proceso de paz, no digo que no beneficiara al país en general, sino ¿Quién se beneficiara más con esto, los políticos, los medios, las víctimas o los insurgentes? Según la política del gobierno Santos, hay que seguir con el proceso sin solicitar el cese de hostilidad o el desarme guerrillero. Los medios siguen el camino de informar lo más importante de la negociación sin generar profundidad o información pedagógica para el país. Las víctimas, las que fueron a la Habana y quienes siguen en Colombia, esperan resultados ante sus situación social, pues les brindan un apoyo pero ¿a qué costo? Las Farc, según han dicho a los medios, están buscando que el sector agrario, las comunidades rurales y las menos atendidas por los servidores públicos, tengan una vida plena, además de algunos avales del gobierno para  quienes no cometieron crímenes de lesa humanidad. 

Ahora todos queremos la paz, pero no sabemos que implica tener y mantenerla. Hay campañas de motivación y atención a favor de la paz como #SoyCapaz. Creada el pasado 8 de septiembre por el periodista Marc de Beaufort y la fundación Andi, ha llevado a más de 120 empresas nacionales e internacionales a cambiar sus colores de marca, generar publicidad y mostrar ese lado blanco y pacifico que busca afianzar la fe del colombiano. Mas la motivación de #SoyCapaz solo guía a mover a la población, sin explicarle bien que conlleva la paz.

#SoyCapaz

Los colombianos nos seguimos preguntando ¿quién está guiando esta situación? Y ¿Cómo nos afectará? Preguntas que no han sido respuestas por medios convencionales o alternativos. Es una cortina de humo en la que nos  atraparon entre debates, negociaciones, denuncias y mediación mediática. El cuarto poder no solo debe informar sino también educar. El proceso de paz no solo debe estar en la Habana sino también en la aceptación, adaptación y desarrollo de todos los colombianos. Víctimas y paz deben ir de la mano en un camino de verdad, sin cortinas, dudas y confusiones. Que la paz no sea motivo de conflicto y no caigamos en una división política pues ante las palabras de Maquiavelo “divide y reinaras” la pregunta será ¿Quién nos gobernará?